sábado, mayo 28, 2005

Imperturbable

Una p-i siempre tiene el control.
Una diva puede con todo.
Todo le resbala, para todo tiene solución, aunque en el fondo no le afecte.
(Una p-i es una dama dura)
Cualquier conflicto será superado de forma fácil y rápida, sin mayores conseqüencias.
Siempre con la sartén por el mango.


Realidad:

BLOOOOOOOUUUUUUUUUUMMMMMMMM! (Batacazo)

No, no, ya hemos dicho repetidas veces que una p-i nunca se auto-engaña.... u_u

sábado, mayo 07, 2005

12.-Autocompasión

Después de esta corta temporada exiliada de modo "completamente voluntario" en la residencia del Sr. X, mi psiquiatra, vuelvo para explicaros uno de los secretos mejor guardados de las p-i.

La autocompasión.

Sí, sí, la autocompasión. Ninguna de nosotras lo reconocerá nunca en voz alta y sólo una sobredosis de alguna extraña substáncia de esas que tanto le gustan a Mr. X hará soltar nuestras lenguas.
Pero las p-i nos autocompadecemos.
En realidad no es más que la lógica consecuencia de esa autofustigación que tanto nos gusta practicar y que convertimos así en un perfecto círculo vicioso (mmm!).

Autoflagelo-Autocompasión-Autodesprecio-Autoflagelo...

Evitaremos la autocompasión en círculos abiertos pero cuando estamos contigo (sí, sí, contigo) y solamente contigo, daremos rienda suelta a nuestro espíritu de plañideras con el único fin de que nos recuerdes lo divinas que somos.

Ejercitada en privado es aún más fructífera ya que nos permite soltar esos dos lados de nuestra personalidad que llevamos dentro, o incluso nuestras múltiples personalidades en según que casos (os he presentado ya a obsesiva-compulsiva, mi compañera de cerebro?) y jugar a "poli-bueno, poli-malo" hasta vovlernos completamente locas.

Y es que lo malo de la autocompasión es que deja un gusto amargo y lejos de reconfortar suele provocar un profundo asco hacia una misma que no debería caer en debilidades así.

Y es que, si somos divinas, no hay nada de lo que compadecerse, verdad?

jueves, mayo 05, 2005

Enter sadman

Una buena p-i siempre intenta estar activa: trabaja sin parar, sale a todas horas, siempre tiene un plan en mente, algo que hacer cuando acabe lo que está haciendo... Sea lo que sea, mientras la mantenga entretenida. La cuestión es no tener ni un momento para pensar en una misma, no sea que los problemas que se intentan ocultar aparezcan en la superficie, de lo mal escondidos que están...

Pero llega la noche, duerme y sueña... y son sueños sobre guerra, sobre mentiras, sobre dragónes y cosas que muerden*........ y se levanta cada día más cansada, pero la actividad no puede parar, no puede pensar...aunque los sueños le digan más que sus propios pensamientos, y siga luchando cada noche consigo misma. Hasta que un día decida no levantarse, se tome un descanso de si misma y reflexione, y deje que todo lo que ocultaba le venga a la mente y empiece a solucionar cada una de sus pequeñas neuras.
Pero hasta que llegue ese día...


(adaptación de una canción de Metallica...)